De acuerdo a un informe de la Universidad Austral, los menores stocks del cereal y los operadores que intentan recomprar posiciones ya vendidas presionan la cotización del cereal.

El clima sigue jugando su partido en el negocio del trigo y está situación ya se percibe en una tendecia alcista en los precios locales. De acuerdo a un relevamiento de la Universidad Austral, los menores stocks del cereal y los operadores que intentan recomprar posiciones ya vendidas hacen que las cotizaciones se mantengan en un nivel elevado.

Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de esa casa de estudios, explicó cómo se comportó el mercado en las últimas semanas. “Nadie quiere vender con tantas dudas productivas y el mercado se desprende al alza”, señaló.
En este contexto, el docente buscó analizar cómo responderán los precios, ante la incertidumbre que genera la posibilidad que haya problemas en la entrega de granos. “Por esto el mercado está tan alto y la gran pregunta es si después de las recompras bajará la paridad de exportación, más cerca de U$S 310 por tonelada”, analizó.

Romano planteó otro escenario, en donde la falta de trigo, la buena situación financiera de los productores y la necesidad del consumo interno. “Con un mercado en la zona de U$S 350, parece que a la baja el riesgo no es mucho y ante una suba podríamos ver precios mucho mejores”, destacó.
QUE PASARÁ CON LA PRODUCCIÓN

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), la zona núcleo tendrá un 83% menos de trigo respecto a 2021/22. En este punto, calcularon que la productividad de la región será de 1,3 millones de toneladas versus la última campaña que aportó 7,8 millones.

El especialista de la Universidad Austral explicó que mientras la producción granaria en Brasil sufre menos las incidencias del clima, en nuestro país los cultivos padecen un combo de seca y heladas.

Ante este panorama, sostuvo que se atrasó la siembra de maíz de primera con dudas sobre sus rindes y en la soja también hay demoras en la implantación. “Todas las expectativas de están puestas en que se atrase la siembra de soja para evitar el clima seco que se prevé en el corto plazo, y que tengamos mucho maíz tardío, que también podría estar más a salvo que el de primera del clima seco”, concluyó Romano.