En el ámbito doméstico, el precio de la hacienda de reposición no sube y complica al negocio. Por el lado de las exportaciones, cayó fuerte el precio de la tonelada vendida a China y Europa
En el marco de una charla organizada por la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra), el consultor ganadero Fernando Gil describió un panorama complejo para la actividad, al analizar los valores de la hacienda de consumo y los márgenes para la producción y la industria.
Una de las variables que preocupa a esta cadena de valor es la recomposición en el precio de las categorías de consumo, frenada desde hace cinco meses.
Sobre este tema, el analista consideró que en diciembre podría registrarse una mejora, pero de menor magnitud a lo que el sector espera.
En este punto, influye la combinación de menor oferta procedente de los feedlots que se encuentran en vaciado y una mayor tracción en el consumo, a partir de la proximidad de las fiestas navideñas.
De persistir este escenario, Gil estimó que la recomposición será mayor entre febrero y marzo, cuando los corrales estén con menor ocupación y que la capacidad de consumo mejore tras el período vacacional.
COSTOS EN ALZA…
En el último año, detalló que mientras el maíz sufrió un incremento superior al 90%, la hacienda destinada a faena aumentó un 57% y la invernada 40%.
En este contexto, el negocio del engorde a corral es uno de los eslabones más golpeados. De acuerdo a datos de la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), la pérdida por cabeza engordada -contabilizando costos productivos y financieros- asciende a $30.500. La suba en la tasa de interés es un golpe difícil de digerir para la actividad.
Para que los feedloteros recuperen rentabilidad, el consultor calculó que la cotización de la hacienda de consumo deberá ser superior a los $100. En la actualidad, novillitos y vaquillonas no superan los $330 por kilo vivo.
…Y PRECIOS QUE NO REPUNTAN
En tanto, los precios sufren un doble desgaste, tanto en el ámbito doméstico como en la exportación. De acuerdo a datos oficiales, la carne también registra subas por debajo de la inflación y en octubre no superó el 3%, contra un incremento mensual de esa variable en 6,3%.
La exportación también se ajustó el cinturón, con un derrumbe en el valor de la tonelada exportada a los principales destinos. En el caso de Unión Europea, la cuota Hilton cayó de U$S 17.000 a U$S 9.000 por tonelada y los de China de U$S 6.000 a U$S 4.500.
“Esa baja es más marcada cuando se tiene en cuenta el atraso cambiario y la brecha con el dólar real, por lo tanto la cadena no percibe esos dólares sino mucho menos”, sostuvo.