Tras los aumentos decretados por Energía en la fabricación de etanol, las empresas más pequeñas alertaron por los actuales márgenes en la generación de biodiésel.


La Cámara de Empresas Pymes Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb) solicitó que el biodiésel tenga aumentos “en línea con la inflación”. Además sostuvieron que las últimas subas “están llevando a las firmas a una crisis que las pone al borde la parálisis”.

“Nuestro compromiso es seguir invirtiendo para industrializar la biomasa y generar energía, defender los 2.000 puestos de trabajo que generamos de manera directa y los 10.000 de manera indirecta y seguir aportando al desarrollo de las economías regionales; pero para ello necesitamos seguir produciendo”, sostuvieron desde la Cepreb.


Las pymes pidieron que se haga “de manera urgente” la publicación de un nuevo precio para el mes de abril.


Esta semana la Secretaría de Energía comunicó en el Boletín Oficial un incremento del 4,5% en el bioetanol, insumo para las naftas que proviene principalmente del procesamiento de maíz y/o caña de azúcar, y que tiene a Córdoba y el noroeste del país como los principales polos productores.

Para el caso del biodiésel es la soja el principal grano que aporta materia para su procesamiento. Y la zona núcleo, con Santa Fe a la cabeza, la región del país que más participa en su producción final.

LAS ÚLTIMAS SUBAS
A fines de noviembre último, el Ministerio de Economía acordó con las petroleras un sendero de precios para la nafta con incrementos de 4% en diciembre, 4% en enero, 4% en febrero y 3,8% en marzo.

En línea con esto, la Secretaría de Energía autorizó un aumento mensual del 4% entre diciembre y marzo para el biodiesel.

“El ritmo de devaluación mensual también superó al sendero de precios, siendo del 22% desde noviembre de 2022, lo cual afecta directamente al aceite de soja, que cotiza en dólares y es el principal insumo para la elaboración de biodiesel”, expusieron.

En el sector entienden que, en principio, los precios de la nafta comenzarán a reflejar los incrementos pendientes de los impuestos a los combustibles líquidos que fueron suspendidos nuevamente a fines de diciembre pasado hasta el mes próximo.

Por eso el reclamo en el biodiésel cobra fuerza en el sector pyme.