Sobre el final del cierre de la ventana de siembra maicera, la falta de lluvias demora las decisiones para el maíz temprano. En cebada, se recortó la previsión de cosecha en casi 300.000 toneladas
La falta de lluvias en las principales regiones agrícolas representa un auténtico dolor de cabeza para los productores. En un contexto de fuerte sequía, el volumen de cosecha 2022/23 sufre recortes cada semana.
En primer término, ante la ausencia de agua y las últimas heladas tardías, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvió a achicar su pronóstico de cosecha de trigo: la semana pasada lo había reducido a 16,5 millones de toneladas, y ahora lo ajustó a 15,2 millones.
De esta manera, se posicionó casi en el mismo valor que prevé la Bolsa de Comercio de Rosario.
“Luego de relevar los daños generados por las ultimas heladas sobre gran parte del centro y sur del área agrícola, sectores sobre el centro reportan daños como amarillamiento de espigas e interrupción del llenado de grano, hasta perdidas adicionales de área cosechable. A la fecha el 56 % del área reporta una condición hídrica regular/sequia“, resumió la entidad porteña.
TOBOGÁN GENERALIZADO
El problema, no obstante, es que la entidad porteña ante este panorama, recortó también su proyección de siembra de maíz, y rebajó su cálculo de cosecha de cebada.
En el caso del cereal de verano, la entidad ubicó la siembra en 7,3 millones de hectáreas, 200.000 por debajo de la proyección que sostuvo hasta la semana pasada y 400.000 menos que en la campaña anterior.
Si bien se registraron algunas lluvias en la última semana en el centro y norte del área agrícola, la falta de humedad óptima en los perfiles impedirá que se concrete la siembra del área proyectada con planteos tempranos de maíz con destino grano comercial.
A días de finalizar la ventana óptima para la incorporación de planteos tempranos, los productores comenzaron a optar por siembras tardías, o bien analizan volcarse a soja de primera.
“Son necesarias lluvias durante las próximas semanas para asegurar una buena emergencia y un homogéneo stand de plantas en las provincias de Buenos Aires y Santa Fe”, detallaron. En Córdoba, la ausencia de precipitaciones demora la emergencia de los cuadros del cereal sembrados en octubre y en zona núcleo, no logran avanzar los planes de sumar maíz temprano.
LA CEBADA TAMBIÉN SUFRE
En cuanto a la cebada, el informe subraya que las heladas restaron puntos al cereal y la proyección de cosecha cayó en casi 300.000 toneladas.
De esta manera, se espera un volumen de producción de 4,7 millones de toneladas y si no se registran lluvias que frenen el deterioro del cultivo, seguirán las pérdidas.
“La falta de precipitaciones sobre gran parte de las 1,3 millones de hectáreas continúa condicionando el crecimiento y la definición de los rendimientos“, señalaron los técnicos de la bolsa porteña.