El Índice de Precios en Origen y Destino que elabora CAME mostró que este concepto pasó de 3,4 veces en diciembre a 3,5 durante enero. Frutilla, el mayor porcentaje; manzana roja, el menor.


Un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) estableció que en el pasado mes de enero se incrementó la brecha de precios entre lo que recibe un productor agropecuario y lo que paga el cliente final en las góndolas de almacenes y supermercados.

El denominado “Índice de Precios en Origen y Destino” (IPOD) marcó que el precio final fue 3,5 veces más alto que lo que recibe el sector primario.
La medición fue hecha por Economías Regionales de CAME y estableció que durante enero los precios de los agroalimentos se incrementaron 3,5 veces entre origen y destino.

“Este dato representa un leve incremento respecto de la brecha de 3,4 veces de diciembre 2022. En el primer mes del año los consumidores pagaron $3,5 por cada $1 que recibieron los productores”, plantearon.




De este modo, en promedio, la participación del productor explicó el 28,2% de los precios de venta final.

PARTICIPACIÓN: LOS QUE MÁS CRECIERON
La frutilla fue el producto que picó en punta en este ítem. Así, los productores de todo el país se alzaron con una participación del 51,6%, lo que redujo de manera importante su brecha, que fue de 1,9 veces.

“Los precios aumentaron un 42,4% al productor y un 12,5% al consumidor. Dado que es una fruta que todos necesitan tener en góndola, el verdulero y/o el hipermercado resigna rentabilidad, achicándose así la diferencia entre el precio que recibió el productor y el que pagó el consumidor”, fundamentaron.


Seguido a este producto, la acelga y el repollo compartieron un coeficiente de 2,5 veces.- Ambos registraron un aumento en origen de 52% y 96%, respectivamente –por altas temperaturas que quemaron las verduras de hoja verde–. En tanto, en destino se incrementaron 21% en el primer caso y 8% en el segundo.

Los huevos y el pollo tuvieron un resultado de 2,2 veces. “Por lo general tienen sistemas de producción integrados, lo que significa que todos los actores de sus respectivas cadenas de valor son parte del riesgo del negocio”, precisaron.

¿DÓNDE HUBO MÁS DIFERENCIAS?
Según CAME la manzana roja cayó a 10,1 veces y fue el producto que más mostró la disparidad en ingresos. “Tuvo un aumento mensual de 23% en los precios de origen y de 40% en góndola”, precisaron.

También lo siguieron la zanahoria (10), el zapallito (9,1), la pera (7) y la mandarina (6,4 veces).


“Los precios de la pera, por su parte, se incrementaron 23,1% en origen y 9% en destino. Cabe mencionar que ambos productos de estación han experimentado un reacomodamiento en los precios al productor”, expusieron.

Otra de las frutas que presentó una gran diferencia de precios del campo a la góndola, en este caso por falta de oferta, fue la mandarina –producto fuera de estación– con una suba mensual de 29,3% en origen y 14% en destino.

En cuanto a las hortalizas, la zanahoria registró un aumento de 21% en los precios al productor y de 18% al consumidor, mientras que el precio del zapallito bajó un 10% en origen y un 12% en góndola.